La tierra de los resignados

Van pasando los dias y las lagrimas ya se me acabaron
he bajado de peso, he llorado, me he lamentado, me he frustrado
Me he pedido muchas explicaciones y finalmente he terminado por aceptar.
Un aceptar bastante complejo, porque implica mucho mas resignación que convencimiento, porque me ha costado y aun me cuesta entenderlo todo.
Todo esto pareciera un mal sueño, que tan solo con un leve movimiento se terminaria y podria despertar tal como estaba antes.
Pero no es asi, y ese aceptar esta realidad trae muchos miedos y temores
Muchas dudas sobre que pasara de ahora en adelante.
Y vamos que se que hay cosas que no seran tan malas.
porque podre pasar mas tiempo con mi familia, con mis hermanos y mis padres, como no con los amigos.
Entrañables personas que aun persisten en acompañarme sin que yo pueda entender como.
Y pasan los dias y esta sensación se va disipando como si todo fuera un mal clima, una pequeña tempestad que se va marchando, o mejor dicho un ciclón que ya paso y que si bien ha desmoronado muchas casas, tejados y dejado al descubierto aunque es muy cursi mi corazon, ya se fue.
Y ese ya se fue, me hace pensar en que a mi vida le llego nuevamente ese sabor agridulce que necesitaba, para sentirme vivo.
Porque no todo puede ser felicidad y dicha en la vida, las penas y el dolor son necesarios para elaborar esa mezcla tan deliciosa y abstracta que es nuestra alma.
Hoy me siento mejor, igual mi terquedad me hizo hablar con ella, y supe que si bien la nostalgia me queda, esos sentimientos han menguado, se han ido como esas gotas de agua que siempre quedan en el lavabo.
Mas tarde saldre con algunos amigos, a conversar, a vivir.
y es extraño que pueda decir eso cuando hace poco me sentia morir,
cuanod solo queria tirarme por la ventana porque no aguantaba el dolor.
Pero gracias a dios o algun ser superior que habita alla arriba, y que supo mantenerse ajeno y aislado cuando me lo propuse.
Ha vuelto con fuerzas con animos y ganas de apoyarme y cobijarme por estos dias.
Porque dentro de todo este dolor sentia un abrazo, una mano que me ayudaba, y que es dificl de entender pues tampoco soy muy cristiano que digamos.

Hoy es viernes y dejo esto aqui porque se me hace tarde para seguir viviendo.