La tierra de los resignados
martes, noviembre 04, 2008
en la infernal noche
y es verdad que el camino se hace angosto a medida que el sol se oculta
en donde discurren aun pequeños rayos de luz empecinados en alumbrar objetos que no se lo merecen
es de noche cuando regreso a casa tambaleante con los ojos bien cerrados creyendo aun que la noche por mas oscura que sea siempre transmite ese algo de luz
mientras un niño pasa acelerado en bicicleta por la llamada de su madre, otro yace inclinado vomitando dolores demarcando con ello alguna ruta hacia un escape
y es entonces que sentado en la comodidad de una piedra dibujando aquellas siluetas sin forma
uno se da cuenta que faltaran muchas noches en vela esperandote
aqui..
al borde..
al extremo...
rodeando con tus cabellos esta silueta sin forma..
sintiendo que al fin y sin derecho a huir
has llegado para quedarte
en donde discurren aun pequeños rayos de luz empecinados en alumbrar objetos que no se lo merecen
es de noche cuando regreso a casa tambaleante con los ojos bien cerrados creyendo aun que la noche por mas oscura que sea siempre transmite ese algo de luz
mientras un niño pasa acelerado en bicicleta por la llamada de su madre, otro yace inclinado vomitando dolores demarcando con ello alguna ruta hacia un escape
y es entonces que sentado en la comodidad de una piedra dibujando aquellas siluetas sin forma
uno se da cuenta que faltaran muchas noches en vela esperandote
aqui..
al borde..
al extremo...
rodeando con tus cabellos esta silueta sin forma..
sintiendo que al fin y sin derecho a huir
has llegado para quedarte
