La tierra de los resignados

No es tan dificil decir que si,

que quieres y deseas mirar el mismo punto en el horizonte,

que puedes decirle a tu corazón que le esta permitido querer,

tampoco lo es tomarme de la mano y caminar por las calles,

sin temor a una mirada escondida que pueda sorprenderte.

Pero en el fondo sabemos que lo es,

porque los miedos te invaden,

las dudas eternas de saber

que una relación casi siempre termina en una ruptura.

Ese miedo que se apodera de ti en las noches,

que te captura y te dice que algo anda mal,

ese mismo terror que sientes cuando llegas un lunes al trabajo

y te espera un sinfin de papeles y documentos.

Ese miedo que me encargare que se acabe,

porque cuando uno quiere ya no es un miedo tan grande,

se va reduciendo, hasta que su dimensión es tan escaza

que puedas cogerla con la yema de tus dedos y saborear tu victoria.

Y ese miedo te invade hoy que tambien es lunes,

porque son dias de mierda,

dias que aunque aparezca el sol no camuflan su sentir,

y sin embargo,

se que aunque despues de leer esto sigas diciendo que todo esta mal,

que la ensalada como lo denominas tu crece cada dia mas,

la contradicción abra llegado a tu corazón,

porque aunque parezca irreal, tambien me has empezado a querer